Ahora que estoy encerrado en este cuarto,
ahora que estoy solo con mi rostro en la reja,
solo, con los recuerdos de ayer,
solo otra vez, sin la esperanza de volverte a ver.
Ahora que estoy encerrado en este cuarto otra vez,
ahora que estoy en este cuarto, mi tumba,
¡Que mierda!, el dolor de tu adiós,
rey tirano de mi cuarto
que somete por tu culpa.
¡Que mierda!, el dolor de tu adiós.
¡Que mierda!, se ha vuelto mi rey tirano.
Cuando la puerta de mi cuarto se abra,
cuando yo sea libre,
pedirás perdón por tu teatro en escena,
pero no habrá forma de que lo adquieras,
solo acuérdate, acuérdate de mi rey tirano,
de tu adiós y mi cuarto.
Hoy mi estrella me condujo a la luz
y me alejo del hierro y la noche,
¡Que mierda!, ahora me llamo a la calma,
ahora todo esta bien,
ya me deshice de tus cadenas,
las cadenas de tus palabras.
¡Que mierda!, el dolor de tu adiós.
¡Que mierda!, por fin llegó a su ocaso.
Eso es todo lo que es, lo que eres
y aunque ahora quieras volver, acuérdate,
acuérdate de mi rey tirano, de tu adiós y mi cuarto.
Ahora, nuevamente, emprendes el retorno
sin saber que puedo ver,
la confianza que brota de tus ojos
te tiende la trampa de creer
que para ti la puerta sigue abierta,
regrésate, para ti ya no tengo rostro,
ni rey, ni cuarto, ni cadenas que me atan,
regrésate, reina del dolor con ojos de confianza,
regrésate, que tu reino ya no existe,
solo queda mi espalda....,
5 puntos.....,
y un adiós.